La Nada del Todo
¿Y si el mundo en el que vivimos no existe? ¿Y si todo lo
que creo sentir no es más que una mala pasada de mi imaginación, una artimaña
barata, una ilusión producida por el pensamiento; por los deseos más profundo de
vaya a saber quién? ¿Qué conseguiría si me animara a gritar, a exigir; si me
animara a vivir por mí misma, si con sólo pronunciar las palabras exactas
pudiera materializar aquello que creo desear?
Jamás.
Teniéndolo delante, corporizado,
real, al alcance de mis dedos, no sabría que hacer. No podría soportarlo. Adiestrada,
ciega, por inercia le daría la espalda, me convencería de que no es suficiente,
de que no me alcanza. Entonces seguramente empezaría a desear de nuevo otras cosas, otras vidas, otros
sueños...para así poder seguir...
(quejándome).
(quejándome).
Comentarios
Publicar un comentario